Peñistas del Aplec del Caragol de Lleida: "La fiesta tiene futuro y queremos que los niños crezcan con la tradición"
Las pistolas de agua y jugar con los amigos, los favoritos entre los más pequeños del Aplec. Las familias aplauden los controles de y piden mantenerlos

En familia y con amigos celebraron ayer la jornada los peñistas, con los caracoles a la ‘llauna’ en primer plano. - PAU PASCUAL PRAT
Las pistolas de agua. Esta fue la respuesta unánime a nuestra pregunta de qué es lo que más les gusta a los más pequeños del Aplec del Caragol. Esto y encontrarse con los amigos fueron durante el fin de semana los atractivos para las generaciones futuras de una fiesta gastronómica que, para sus participantes, tiene el futuro más que asegurado. “Para nosotros, el Aplec es sagrado”, señaló Òscar, de la peña Ordre del Cargol, junto a su pareja Mariona y sus hijos Roc y Carles. “Se lo pasan muy bien durante todo el día, sobre todo con las guerras de agua”, señalaron. “Llevo 20 años en la peña y teníamos claro que a los niños les gustaría”, destacaron. En la misma línea, Laia, de Los Arrebujaitos, afirmó que “queremos que los niños crezcan con esta tradición”. De hecho, es su primer año en la Aplec y su valoración no pudo ser más positiva.

Cuinant per a tothom a la colla La Llauna, en l’última jornada de la festa. - PAU PASCUAL PRAT
Por su parte, Nadia, de la peña La Graella, consideró un “gran acierto” los controles de al recinto y opinó que es una medida que debería mantenerse, igual que hicieron otras familias. “Con los grandes, que tienen entre 12 y 13, te da más seguridad para que campen a sus anchas con los amigos”, dijo. “Hoy mi hijo se ha levantado y me ha dicho que no quería que el Aplec se acabara, que debería durar más días”, explicó con una amplia sonrisa. Además de las pistolas de agua, como es obvio, el pequeño Jan dijo que también le gustan “los caracoles de chuches”.
Para los visitantes, esta fiesta también es una cita ineludible en el calendario. Como es el caso de Núria y Carles, de Cervera, que la visitan todos los años. Lo hicieron acompañados de sus perros Shandor y Drago, que aunque un poco asustados por la música y el ruido, también encontraron su espacio en el recinto. “No podíamos dejarlo tantos días en casa, y ha venido a vernos”, explicó Ilse, de la peña Assoc, con su perro Golfo en brazos.
Más de 2.000 personas han utilizado los buses gratuitos
Más de 2.000 personas han utilizado los buses gratuitos que la Paeria ha puesto en marcha durante el Aplec del Caragol. Concretamente, cerca de 1.800 personas usaron el bus nocturno (de la L-7) con paradas a demanda (773 la noche del viernes y 980 la del sábado) y 300 más el bus lanzadera que unía el parking de la Copa d’Or con el recinto del Aplec. La teniente de alcalde Cristina Morón destacó que el uso del bus “tiene un doble componente de pacificación del tráfico y de mejora de la seguridad”. Por su parte, la teniente de alcalde Carme Valls detalló que cerca de 500 personas se han informado en los Puntos Lila y los de Nits Q, dentro de la campaña ‘1.000 ulls’ contra las violencias machistas y LGTBIfóbicas. Por otra parte, en el recinto también se instaló una carpa de la Associació contra el Càncer de Lleida, cuyas voluntarias destacaron la solidaridad de peñistas y visitantes que se acercaron.
187 atenciones en el hospital de campaña y seis traslados al Arnau
Hasta el mediodía de ayer, el hospital de campaña habilitado en el recinto con la Creu Roja de Lleida, había atendido 187 intervenciones, la mayoría por cortes y quemaduras de carácter leve, según destacó el presidente de la Fecoll, Ferran Perdrix. Asimismo, desde el viernes se hicieron seis traslados al hospital Arnau de Vilanova, aunque dijo que también eran situaciones sin gravedad. Durante el Aplec, se desplegaron 70 agentes de la Urbana, que, destacó la Paeria, aseguraron una fiesta sin incidentes relevantes y vigilaron y regularon el tráfico en los puntos más concurridos. En el recinto también estuvieron presentes voluntarios de Protección Civil así como los Mossos d’Esquadra. Algunos de los peñistas destacaron que este año se ha mejorado la seguridad y que tienen cabida todas las edades. Desde la Fecoll también remarcaron la buena acogida entre los visitantes y periodistas foráneos.