El Consorcio del Museo de Lleida recurrirá al Supremo la sentencia por el arte de la Franja
La institución ve falta de fundamento en la resolución de la Audiencia de Huesca y reivindica la unidad de la colección

Imagen de archivo de la exposición del Museo de Barbastro.
El Consorcio del Museo de Lleida interpondrá un recurso de casación en el Tribunal Supremo contra la sentencia de la Audiencia de Huesca que ratifica que las 111 obras de arte de la Franja que estaban en el Museo de Lleida son propiedad de las parroquias de la diócesis de Barbastro-Monzón. Así lo han decidido este lunes, por unanimidad, las instituciones que conforman el consorcio: la Generalitat, el Ayuntamiento de Lleida, la Diputación, el Obispado y el Consejo Comarcal del Segrià. En un comunicado, el consorcio justifica que no comparte la resolución judicial porque entiende que "no está adecuadamente fundamentada" y asegura que seguirá reivindicando la unidad de la colección del Museo de Lleida y que las 111 obras "forman parte del patrimonio cultural catalán".
El Consorcio del Museo de Lleida mantiene que la diócesis de Lleida adquirió la propiedad de las obras mediante compraventas, permutas y donaciones, o bien por usucapión, y ha aportado, por cada una de las obras, documentación histórica e informes periciales.
"Los tribunales civiles han negado valor a todas estas pruebas y se han mostrado muy estrictos con los argumentos del consorcio. Por el contrario, el obispado de Barbastro-Monzón no ha alegado en virtud de qué título legal estas parroquias son propietarias de estas obras y no ha aportado ninguna prueba de su adquisición", recoge el comunicado.
Según el consorcio, la aplicación de las normas que regulan los procedimientos civiles "obligaría a desestimar la demanda del obispado de Barbastro-Monzón". Por el contrario, lamenta la institución, "el tribunal ha obviado este defecto en los planteamientos del obispado aragonés y ha dado por hecho, sin fundamento, que las parroquias de la Franja de Ponent son las propietarias de los bienes en disputa".
El consorcio explica que seguirá defendiendo la unidad de la colección del Museo de Lleida, un posicionamiento que considera "una reivindicación legal y justa" porque las 111 obras "forman parte del patrimonio cultural catalán".
A finales de marzo, la Audiencia oscense confirmó la sentencia del juzgado de Barbastro que en diciembre de 2019 había ordenado la devolución de las piezas a Aragón, un traslado que culminó en 2021, y desestimó los recursos del Obispado de Lleida, el Consorcio del Museo de Lleida y la Generalitat.