Entrañables vecinos y, sin embargo, rivales
Solo Balaguer y Mollerussa han jugado en el Camp d’Esports como visitantes en Liga|| Fueron tres campeonatos (64-65, 88-89 y 89-90), pero resultaron ser de lo más apasionantes

La primera y única vez que el Balaguer se enfrentó a la Unión Deportiva Lérida en el Camp d’Esports (temporada 64-65). Perdió 2-0 cuando todavía aspiraba al ascenso a Segunda A.
Hasta el momento, y en la historia del fútbol en Lleida, tan solo dos equipos han jugado en el Camp d’Esports como visitantes en competición oficial. El At. Lleida puede ser el tercero si es capaz de superar las tres rondas de playoff (este texto está escrito antes del At-Lleida-Badalona que se disputó el domingo). Sí, en la 39-40 el Borjas Blancas (ese era su nombre) estuvo allí y, en la 40-41, repitió, con Cervera y Tàrrega. Era en la Segunda Regional y el rival era el Lérida Balompié y el escenario, el campo de la carretera de Corbins. O sea, que no era el caso. El Balaguer fue el primero, en la 64-65 en Tercera y disputó hasta el final el ascenso a Segunda División con la Unión Deportiva Lérida. Lo entrenaba el internacional José Juncosa (Les Borges, 1922), integrante de la mágica delantera del At. Madrid: Juncosa, Ben Barek, Pérez Paya, Carlsson y Escudero. Subió el Lleida en aquella mítica promoción con el Calvo Sotelo de Andorra. Más de veinte años después, le tocó el turno al Mollerussa... y en Segunda. Bajaron los dos. En la campaña siguiente, lucha total por el ascenso. Subió el Lleida de Mané, como campeón, en detrimento de los del Pla d’Urgell, entrenados por Jordi Gonzalvo. Fue una liga apasionante que no se decidió hasta el final.